Un motivo de consulta frecuente es la uña encarnada.
La uña encarnada, es una patología ungueal muy frecuente donde un fragmento de uña penetra en la piel provocando inflamación, gran sensibilidad, dolor y, si persiste, infección.
Es más común en el sexo masculino y pese a poder aparecer en cualquier rango de edad, es más frecuente entre los 20 y los 40 años y en el primer dedo o hallux.
Por la inflamación y el dolor que produce la uña cuando se encarna, es importante aplicar el tratamiento adecuado a tiempo.
En casos leves aplicaremos tratamiento conservador.
Cuando la uña se encarna de forma repetitiva provocando episodios de dolor e infección la cirugía será la mejor elección.
Conociendo las causas principales de la uña encarnada, sus síntomas y la prevención podréis poner solución a tiempo. Acude siempre a tu podólogo de confianza si notas sensibilidad, inflamación o dolor por una uña encarnada.
Índice de Contenidos
CAUSAS DE LA ONICOCRIPTOSIS
Los motivos por los que aparece una uña encarnada pueden ser:
- Un mal corte de las uñas: Es la causa más frecuente. Cortar las uñas demasiado, dejar los bordes ungueales redondeados en lugar de rectos, o dejar algún pico de uña sin darnos cuenta puede provocar el desarrollo de la onicocriptosis.
- Microtraumatismos: Los dedos pueden sufrir golpes, impactos, en diferentes actividades como senderismo, fútbol, baloncesto, balet, etc…
- Predisposición genética: En muchas personas, el motivo de que la uña se encarne es simplemente un factor hereditario.
- Calzado inadecuado: Las uñas encarnadas pueden ser el resultado de llevar un calzado de punta estrecha o un calcetín o media demasiado apretado.
- Tipo de marcha
- Hiperhidrosis o exceso de sudoración.
SINTOMAS DE LA ONICOCRIPTOSIS
Las uñas encarnadas las podemos dividir en 3 grados.
En el grado 1 la uña encarnada cursa con inflamación, dolor a la palpación, enrojecimiento de la zona y no va a haber presencia de pus.
En el grado 2 vamos a encontrarnos mayor grado de dolor, enrojecimiento e infamación y puede haber infección, con presencia de pus en el borde ungueal afectado. Si no se trata a tiempo o se complica puede aparecer un granuloma o engrosamiento de los tejidos.
En el grado 3 vemos un enrojecimiento que se puede extender por todo el dedo, dolor muy fuerte (a veces es imposible calzarse, duele intensamente con el simple roce de las sabanas al dormir.
PODEMOS PREVENIR LA APARICIÓN DE UÑA ENCARNADA
Es importante cortar las uñas adecuadamente: Casi siempre es preferible cortarse las uñas rectas en lugar de redondeadas. Digo casi siempre porque en algunas uñas es posible y en otras es más difícil, según su morfología. Prestar especial atención a primeras uñas o si dejamos algún pico. En el corte de uñas es imprescindible el uso de buen material. Cuando hay una tendencia a sufrir de uña encarnada o resulta difícil el manejo de las uñas por morfología, sensibilidad o edad, recomendamos acudir a una clínica podológica de confianza.
El calzado es muy importante para la prevención de las uñas encarnadas. Evita el calzado estrecho o de tacón alto. Un zapato estrecho va a provocar que la uñas penetren más fácilmente en el tejido blando. Debemos elegir un calzado con la puntera amplia. En deportes como senderismo, trail, running o fútbol es muy importante prestarles atención a las uñas y al calzado de la actividad ya que la suma de micro traumatismos puede dañar las uñas. Importante también que el calcetín no nos vaya demasiado apretado.
Mantener las uñas con la largura adecuada: Las uñas deben mantenerse siempre cortas, pero tampoco han de cortarse en exceso. Un corte excesivo puede provocar dolor y que la uña se empiece a encarnar. Una uña demasiado larga también puede dar problema al recibir mayor presión de calzado
Revisiones periódicas: Es importante acudir al podólogo de forma regular para revisar el estado de las uñas, especialmente si eres diabético, tus uñas están mas curvadas de lo habitual o te resulta difícil cortarlas correctamente.
TRATAMIENTO DE LA UÑA ENCARNADA
La onicocriptosis la podemos encontrar en diferentes niveles.
El tratamiento se decidirá en función de la afectación, puede ser conservador o quirúrgico.
Si nos encontramos ante un grado 1 o afectación leve, recomendamos acudir a la consulta podológica para retirar la espícula y evitar que se complique. Se realizaran curas en casa generalmente de baños de agua con sal y solución antiséptica.
En grados más avanzados tu podólogo revisará los laterales y decidirá el tratamiento más adecuado. Dependiendo del dolor habrá que usar anestesia o no.
Si la uña se acaba clavando de manera recurrente optaremos por el tratamiento quirúrgico. El tratamiento quirúrgico consiste en el corte del tramo ungueal afectado, llegando hasta la raíz. (Estrechando la uña). Una técnica muy utilizada por sus buenos resultados es la matricetomía química, técnica de cirugía ambulatoria, se realizará un estrechamiento de la uña para evitar que vuelva a encarnarse.
